En 2021, los estadounidenses donaron $135.78 billones a organizaciones religiosas e iglesias, según datos de GivingUSA.org. Ninguno de esos fondos fue gravado a nivel local, estatal o federal. ¿Alguna vez te has preguntado: "¿Por qué las iglesias están exentas de impuestos en los Estados Unidos?" Si es así, no estás solo. Es un tema que se debate con frecuencia. Sin embargo, antes de responder a tu pregunta, es importante entender cómo el IRS define a las iglesias y la lógica detrás de su estatus de exención de impuestos.
Un breve capítulo de historia
El emperador romano Constantino (306-337) fue el primero en otorgar el estatus de exención de impuestos a las iglesias en el año 312, después de su conversión al cristianismo. Sin embargo, la exención de impuestos en Estados Unidos para organizaciones benéficas se remonta al Estatuto de Usos Caritativos de Inglaterra del 1601. Desde la fundación de nuestro país, las iglesias han estado exentas de impuestos federales, pero no fue hasta 1894 (Ley Arancelaria) que se volvió oficial. Aunque la Ley Arancelaria fue declarada inconstitucional posteriormente, la exención de impuestos para las iglesias se restableció mediante la Ley de Ingresos de 1913. Hoy en día, los 50 estados y el Distrito de Columbia eximen a las iglesias de pagar impuestos sobre la renta y la propiedad.
¿Por qué las iglesias están exentas de impuestos?
El IRS no grava a las iglesias porque las considera iguales a otras organizaciones benéficas. Esto se debe a que las iglesias apoyan a sus comunidades de varias formas. Muchas proporcionan servicios sociales, como refugios y despensas de alimentos. A menudo ofrecen asistencia a familias de bajos ingresos, incluyendo programas escolares gratuitos. Además, eximir a las iglesias de impuestos se ve como una clara separación entre iglesia y estado.
A cambio de su estatus de exención de impuestos, se espera que las iglesias se abstengan de participar en actividades políticas según la Enmienda Johnson (1954). Lamentablemente, no todas lo hacen. Incluso cuando se descubre que están infringiendo las normas, pocas veces se les castiga con la revocación de su estatus de exención de impuestos.
En 2017, una orden ejecutiva firmada por el Presidente Trump instruyó al IRS a no tomar medidas adversas contra iglesias u organizaciones religiosas por su discurso político. Se suponía que esta orden sobre la libertad religiosa era el primer paso para derogar la Enmienda Johnson, pero a día de hoy la ley permanece intacta.
Requisitos para el estatus de exención de impuestos
Las iglesias, a diferencia de otras organizaciones benéficas y religiosas, son automáticamente consideradas exentas de impuestos si cumplen con los requisitos de la Sección 501(c)(3) del Código de Rentas Internas (IRC), que incluye lo siguiente:
- Debe estar organizada y operada exclusivamente con fines religiosos, educativos, científicos u otros fines caritativos;
- Los ingresos netos no deben beneficiar a ninguna persona privada o accionista;
- Ninguna parte sustancial de su actividad puede intentar influir en la legislación;
- La organización no puede intervenir en campañas políticas; y
- Los propósitos y actividades de la organización no pueden ser ilegales ni violar políticas públicas fundamentales.
Además, las iglesias no están obligadas a presentar el Formulario 990 o 990-EZ del IRS. Sin embargo, otras organizaciones religiosas deben solicitar al IRS el estatus de exención de impuestos (a menos que sus ingresos brutos sean inferiores a $5,000 anuales) y presentar el Formulario 990.
¿Qué es considero como iglesia?
Para efectos fiscales, una iglesia es un lugar de culto. Esto suele incluir templos, sinagogas, mezquitas e iglesias cristianas. El IRS también reconoce algunas convenciones y asociaciones, así como otras organizaciones que puedan cumplir con algunos o todos los siguientes requisitos:
- Una existencia legal distinta
- Una creencia o forma de adoración reconocida
- Un gobierno eclesiástico definido y distinto
- Un código formal de doctrina y disciplina
- Una historia religiosa distinta
- Una membresía no asociada con ninguna otra iglesia o denominación
- Una organización de ministros ordenados
- Ministros ordenados seleccionados tras el cumplimiento de estudios prescritos
- Una literatura propia
- Lugares de culto concretos
- Congregaciones regulares
- Servicios religiosos regulares
- Escuelas dominicales para la instrucción religiosa de los jóvenes
- Escuelas para la preparación del culto
- Escuelas para la preparación del culto
- Cualquier otro hecho y circunstancia que pueda respaldar la solicitud de la organización para obtener el estatus de iglesia.
Para calificar como iglesia, no existe un número determinado de criterios que una organización deba cumplir. Se mantiene como algo ambiguo a propósito para permitir flexibilidad al determinar qué organizaciones califican. De hecho, es tan fácil comenzar una iglesia en Estados Unidos que John Oliver (Last Week Tonight) creó Nuestra Señora de la Exención Perpetua en 2015 solo para demostrar un punto.
Ingresos exentos de impuestos
Muchas iglesias dependen de donaciones, regalos y subsidios para operar. Todos estos ingresos están exentos de impuestos. Además, muchas obtienen dinero de otras actividades. Si los ingresos obtenidos no están relacionados con la misión religiosa de la iglesia, es posible que deban pagar impuestos sobre los ingresos comerciales no relacionados (Unrelated Business Income Tax, o UBIT por sus siglas en inglés). Sin embargo, ciertas actividades suelen quedar excluidas, incluyendo los ingresos generados por:
- Juegos de bingo
- Ventas en tiendas de segunda mano
- Trabajo voluntario
- Listas de donantes
- Regalos o rifas
Las iglesias con ingresos mayores a $1,000 por cualquier actividad no relacionada a su misión religiosa deben presentar el Formulario 990-T del IRS, Declaración de Impuestos sobre Ingresos Comerciales de Organizaciones Exentas.
¿Deberían seguir exentas de impuestos las iglesias?
El debate sobre si las iglesias deberían estar exentas de impuestos o no tiene décadas de antigüedad. Y es probable que se intensifique a medida que más estadounidenses rechacen la religión organizada. Claro que existen ventajas y desventajas alrededor del tema. Por un lado, eliminar su estatus de exención de impuestos permitiría a las iglesias participar libremente en la política sin temor a represalias. Los ingresos adicionales provenientes de los impuestos sobre los bienes inmuebles incluso podrían ayudar a reducir las tasas de impuestos sobre los bienes inmuebles en sus comunidades. Por otro lado, mantener el status quo significa que las iglesias pueden continuar brindando servicios sociales que probablemente se reducirían si el dinero tuviera que destinarse a impuestos. Estos servicios recaerían entonces en los gobiernos locales u otras organizaciones sin fines de lucro, lo que probablemente ejercería presión sobre sus presupuestos.
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